
Un alma que desangra lagrimas de dolor, heridas de un desesperante vacío dentro de rotos pensamientos. Esto es lo que sucede cuando cedes el amor y la pasión a quien luego te cuestiona. El Dios que tanto adoras ya no desea tus plegarias. La saliva se ha vuelto mas amarga que la hiel y los días se tornan en interminables noches lúgubres sin pasado, sin presente y sin futuro. Él lo era todo, era tu magnánima creencia y ahora te ha abandonado. Él fue tu sueño y tu tesoro, nunca dudaste de sus palabras, y ahora en el olvido te ha ahogado. Cuando él estaba frente a ti, tu tan solo veías una imagen fabricada por tu ego, tu condición y tu mente. En realidad "él" no existió, tu sufrimiento tiene como bases la inexistencia, pero su dolor sigue siendo una consecuencia.
Zaratustra
No hay comentarios:
Publicar un comentario